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 Exteriores |
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| 1. Interpretación |
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El muro, en cuestión, ha sido hallado, en el transcurso de las excavaciones dirigidas por A. Carandini, en la vertiente septentrional del Palatino y aparece dotado de una puerta, probablemente la Mugonia, en un estrato fechado hacia el año 730 a.C., aunque sufrió diversas fases reconstructivas hasta su desaparición unos doscientos años después, lo que según Carandini avalaría el relato tradicional sobre la fundación de Roma y su identificación con el murus Romuli, reforzando además la teoría del Palatino como núcleo originario, a partir del cual su población se habría expandido al resto de las colinas romanas.
Sin embargo, la Roma de Rómulo no se identifica exclusivamente con esta colina ni en las fuentes literarias ni en la documentación arqueológica, por lo que no se comprendería bien la existencia de una ciudad cuyo límite jurídico-religioso rodeara tan sólo una parte de la misma, el Palatino, y dejara fuera importantes áreas de gran significación cívica, como el Capitolio, el Comicio o la Regia.
En principio todo muro es un elemento de separación, pero no parece que aquí deba entenderse como expresión de la individualidad de un asentamiento del Palatino frente al exterior, con el fin de proteger su seguridad. Quizás más bien haya que interpretarlo como la fortificación de una acrópolis, o en todo caso del corazón político de la primitiva comunidad romana.
Así se explicaría que el muro fuese reconstruido en el primer cuarto del siglo VII, cuando la unidad del poblamiento en Roma es un hecho consolidado, y de nuevo hacia el 600, en los inicios de la ciudad, aunque ahora, cuando la estructura de Roma está cambiando a fuerte ritmo, el muro ya no parece cumplir del todo la misma función defensiva. |
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