A la vista de tantos problemas como se pueden apreciar en el siglo XVII español, cabría esperar un ambiente lúgubre y poco festivo en la mentalidad de los hombres de aquel tiempo y en su reflejo cultural y artístico, sin embargo, junto a lo lúgubre aparece lo festivo, y buena muestra de ello son los temas que aparecen en las obras literarias, especialmente en las teatrales, y en las pinturas, manifestaciones ambas del más alto nivel de la cultura de aquel tiempo.

Del amplio espectro cultural que habría que reflejar, seleccionamos tres aspectos llamativos: