El cómic se organiza en unidades narrativas llamadas viñetas. Normalmente son de forma rectangular de distintos tamaños, separadas y sucesivos, reflejando el orden temporal en que transcurre la historia. Sin embargo, cada vez más esta estructura general se está haciendo más flexible como puedes ver en las imágenes, tanto en la forma de las viñetas como en sus límites.
Es también propio de lenguaje del cómic cumplir de modo sintético y claro la función de narrar. Se narra con las imágenes utilizando líneas gruesas de contorno y dintorno, que describen con nitidez la figura para que sea n más impactantes, y se narra también verbalmente. Los recursos típicos son las cartelas, los bocadillos y onomatopeyas.