Son aquellas imágenes en las que se describe detalladamente algún aspecto concreto de una materia. La información que desprenden es más específica y, por tanto, el espectador ha de estar motivado e incluso ha de poseer algunos conocimientos para que le resulten imágenes comprensibles.
Nos referimos a imágenes, por ejemplo, de contenido médico o mecánico, en las que se explica algún fenómeno complejo: el funcionamiento del sistema digestivo o un plano geométrico que describe cómo actúa una pieza mecánica en un motor de explosión, etc. La imagen adjunta trata de enseñarnos la mecánica del coche Smart.
Estas imágenes aún siendo descriptivas no son esquemáticas o simplificadas y utilizan un código complejo que ha de ser familiar al espectador. Por tanto, sin estos conocimientos la imagen nos resultará incomprensible.