La huella cultural de Roma - Obras públicas
En relación con el urbanismo se encuentran algunas de las obras públicas más importantes de los romanos. Para ofrecer a los ciudadanos los mejores servicios posibles, las ciudades necesitaban tener un buen abastecimiento de agua y de comida, buenos desagües, buena higiene, etc. Esto explica que en las ciudades romanas se construyeran puentes para cruzar el río en cuyas orillas se asentaban, acueductos para traer agua si no había fuentes cercanas suficientes, basílicas o mercados, termas o baños públicos, gimnasios, etc.
No faltaban en las grandes ciudades edificios conmemorativos, como arcos de triunfo o columnas que embellecían la ciudad.
Entre las obras públicas de los romanos hay que destacar la construcción de la gran red de calzadas que recorría todo el imperio, y que les permitía extraer productos de las distintas partes del imperio para llevarlas a la ciudad de Roma o comerciar entre distintas partes; también las calzadas permitirían al ejército un más fácil acceso a donde quisieran llegar en caso de necesidad.
Las calzadas se construían con un sistema tan sólido que aún se conservan algunas en la actualidad: colocaban cimientos de piedra, y sobre ellos colocaban una capa de hormigón grueso, seguida de otra capa de hormigón fino, para finalmente dejar la parte de arriba con grandes losas de piedra.
También construían las calles de las ciudades con grandes losas de piedra, y se caracterizan esas calles por hacerlas con aceras, detalle que desaparecería en las calles de las ciudades medievales, y no reaparecería hasta muchos siglos después. |