 Los absolutistas fueron un nutrido grupo de nobles y clérigos que no aceptaron la invasión napoleónica pero tampoco la revolución burguesa que implicaba la aceptación de la nueva constitución de 1812.
Defendían la religión católica a ultranza, la sociedad estamental y la monarquía absoluta, elementos definitorios del Antiguo Régimen.
Combatieron junto con el resto de grupos contra los franceses pero, al terminar la guerra, más de sesenta diputados firmaron un documento en el que animaban al rey a volver al absolutismo (Manifiesto de los Persas, 12 de abril de 1814). |