¡Pigmento en estado puro! Se empasta con agua, se moldea y...
...obtenemos unas barritas apreciadas por muchos artistas.
Uno de ellos es Degas, que rompe con la tradición del siglo XVIII donde esta técnica alcanzó gran difusión gracias al retrato y la delicadeza del Rococó.
Degas aplicaba el pigmento en capas sucesivas que iba fijando, consiguiendo efectos que hasta entonces solo el óleo podía conseguir. Colores de gran viveza, luminosos y chillones. Incluso mezclaba vapor o agua caliente, formando una pasta con el pigmento para aplicarlo posteriormente con un pincel.