Una recta, al igual que cualquier figura que se representa en sistema diédrico, posee dos proyecciones. Estas se representan con letra minúscula y se obtienen al proyectar dos de sus puntos sobre los planos de proyección.
Trazas de una recta son los puntos de intersección con los planos de proyección. En estos puntos, (que pertenecen también a los planos), la recta está cambiando de cuadrante, por lo que son la referencia del cambio.
Cuando la recta atraviesa el plano vertical la traza se llama V, y cuando atraviesa el plano horizontal se llama H. H y V se proyectan sobre el plano vertical y horizontal respectivamente, dándonos las proyecciones h, h' y v, v que nos definen completamente las proyecciones de la recta. Uniendo v' y h' obtendremos la proyección vertical r', y con la unión de h y v la proyección horizontal r.