UN PASEO POR LA RED, UN ENCUENTRO EN LA NUBE Y ATERRIZAJE EN LA DIRECCIÓN.
«Fue en el verano del 2008 cuando Doña Díriga contactó conmigo para pedirme mi participación en un estudio que llevaba entre manos sobre el uso de los blogs en educación infantil, así como su seguimiento y valoración por parte de las familias. Por entonces yo estaba comenzando a poner en marcha mi blog de aula con mucha ilusión, pero hasta ese momento no había tomado en cuenta la relevancia y visibilidad que nos da la red.
Desde siempre, partiendo de mi deseo de dar vida a las aulas y visibilidad de lo que dentro de los centros se hace, había tenido inquietudes por trabajar sumando aportaciones, mejorando las relaciones con las familias y coordinando todas las actuaciones del equipo de ciclo.
Con mis paseos por internet y de mano de Doña Díriga, nos fuimos adentrando en una red de profesionales comprometidos con la educación, en la que buscábamos esa TRIBU que nos ayudara a caminar hacia la educación del futuro, la única posible: esa que hace que nos esforcemos en conocer a los alumnos, su necesidades, intereses y motivaciones, sin contar los minutos que dedicamos a la enseñanza o los esfuerzos y la piel que nos dejamos en construir nuevos paradigmas.
Pronto llegaron las sesiones de Cine y Educación, conectando ciudades, profesionales e intereses... Así poco a poco se fue gestando el Plan audiovisual.
De la mano de "Y también la lluvia", la película de Icíar Bollaín, nos sumergimos en la historia y en el presente, en los actos individuales que repercuten para el bien o el mal grupal, a través de las reflexiones en torno a la problemática del agua, de la unión del pueblo y la necesidad de luchar por el bien comunitario.
Con "La guerra de los botones", de Christophe Barratier, el mundo de las relaciones sociales en la infancia nos hizo rememorar la nuestra propia, y a la luz de esos ojos infantiles, descubrir que nada de los que hacemos los adultos, es indiferente para nuestros pequeños.
Para entonces la red se había ido ampliando con Conchita, Julita, Domingo, Salomé, Jesús, Ana, Feli, y tantos otros: Un montón de emoción compartida, de encuentros en el más amplio sentido de la palabra, una nube de sueños compartidos que iban tomando forma con la TRIBU 2.0.
Las mujeres y los clubs de lectura se sumaron a nuestro Plan Audiovisual con "¿Y ahora dónde vamos?" de Nadine Labaki, una conmovedora historia que consiguió removernos por dentro y buscar los puntos de encuentro con otras personas por distintas que sean. Si optamos por sumar en lugar de restar, iremos construyendo nuevos caminos que sean lugar de encuentro. Si la muerte y el dolor a todos nos hace iguales, la vida ha de hacer lo mismo.
Las reflexiones sobre las películas, los valores, sociales y educativos, las emociones transmitidas y compartidas, nos han ido reafirmando en la necesidad de elaborar en nuestros Centros Escolares un Plan Audiovisual que cubra las necesidades e intereses de nuestros alumnos y que nos permita educarlos de un modo realmente integral, y por ello, como centro neurálgico, nos encontramos con las emociones. He aquí eso que llamamos inteligencia emocional, que se potencia con una imagen bien narrada, una historia sentida y coherente, un guion bien hecho, una fotografía elocuente, una música sugerente...
El cine nos hace bucear en nuestros recuerdos, soñar con un futuro mejor, imaginar otras realidades, sentir las más íntimas emociones... Y nosotros los educadores debemos saber desentrañar los misterios del séptimo arte, dejar que nuestros alumnos se expresen, compartan emociones, las verbalicen y descubran los que les gusta y lo que no, lo que cambiarían de una historia o lo que les aporta en su vida. Esto es educar en el sentido crítico, en la responsabilidad, en el amor a la cultura, en la iniciativa.
A lo largo de todo este tiempo, en el que también vimos "Los niños salvajes", "Yo quiero ser soldado" y/o "Arrugas", hemos descubierto que no estamos solos, que somos muchos los docentes que vemos las cosas de otra manera y que trabajamos mucho para que sean realidad. El cine es un lenguaje privilegiado y lleno de futuro y el cine español es patrimonio nuestro, y tiene un valor que hemos de apreciar, tanto como nuestro sistema educativo, que no es tan malo como nos quieren hacer creer.
Si aunamos esfuerzos y comenzamos a ver todos los signos positivos, conseguiremos educar adecuadamente al futuro espectador para que vuelva al cine a lo grande, donde debe estar, y, a la vez, poner en valor la educación pública.
Telefónica y la Academia de cine nos regalaron el 4 de septiembre de 2012, la I Jornada de Cine y Educación, en la que pudimos desvirtualizarnos todas esas personas que llevábamos 4 años luchando porque comenzara a hacerse realidad este momento, en el que el mundo del cine y el mundo de la educación nos sentáramos juntos para debatir sobre la posibilidad de construir un Plan Audiovisual Nacional, al igual que tienen otros países de nuestro entorno. Un encuentro entrañable y potente que ojalá no quede en el olvido y llegue a dar sus frutos en un futuro no muy lejano.
Desde julio de este año, todas estas inquietudes propias me han empujado a tomar las riendas de la dirección de mi colegio, el CEIP San Isidoro, como medio para impulsar un nuevo Proyecto Educativo basado en el diálogo, el consenso, pero también en la reflexión docente: sobre nuestra actuación, sobre el uso de las tecnologías, sobre nuestro entorno y sobre el desarrollo y fomento de la creatividad en las aulas.
Ya no soy una persona aislada en mi aula, tratando de sumar compañeros de aventuras, ahora está en mis manos, en las manos de nuestro equipo directivo, el hacer del nuestro un Centro que apueste por esta ambiciosa línea de trabajo.
En este sentido, en nuestra PGA, aprobada el 31 de octubre, contemplamos el Plan Audiovisual, la comisión de delegados de aula y el uso de las tecnologías en educación. Para ello estamos dotando al centro de medios y generando una variedad de actividades integradas, fomentando proyectos de emprendedores en el aula ( tenemos 5 cooperativas EME), y desarrollando el Plan para la Mejora del Éxito escolar, basado no sólo y exclusivamente en las materias instrumentales, sino proyectando y realizando un proyecto integral de los aspectos antes mencionados, focalizados en :
- Atención a la diversidad.
- Búsqueda de nuevas metodologías y medios para estimular la motivación del alumnado para aprender: Plan Audiovisual, TIC, Art Crafts.
- Estimulación para la lectura y el gusto por la literatura.
- La participación de la familia en el ámbito escolar.
En todo este proceso, la evaluación es una constante que me ayuda a emprender esta nueva tarea con ilusión y constancia, deseando que uno día veamos cumplidos nuestros deseos de una escuela feliz y de calidad, exitosa por ver a sus alumnos desarrollarse como personas íntegras, maduras, con criterios propios, competentes, socializadas y emocionalmente equilibradas.»
Escrito por Olga Catasús Poveda, miembro del colectivo Tribu 2.0.