Introducción
Las TIC están aquí y han venido para quedarse. Eso es algo que tenemos más o menos asumido. A diario las usamos en el aula, en mayor o menor medida pero, cada vez más. Poco a poco, realizamos distintas funciones con ayuda de las mismas, básicamente centradas en el uso y consumo de contenidos: búsqueda y tratamiento de información, exposición de contenidos con el proyector o pizarra interactiva, uso de libros digitales, manipulación de objetos, prácticas con actividades realizadas con distintas herramientas de autor y applets interactivos,...
Pero, ¿y si avanzamos un paso más y las usamos para crear nuestros propios contenidos? O mejor dicho, ¿y si son nuestros alumnos con el apoyo de su profesor, con ayuda de las TIC y servicios y herramientas de la Web 2.0, los que diseñan, elaboran y comparten los recursos?
No es fácil, pero tampoco imposible. Nosotros lo hemos hecho, en clases de Matemáticas de distintos cursos de Educación Secundaria Obligatoria. En este artículo quiero compartir el fruto de estas experiencias llevadas a cabo conjuntamente con mi alumnado de Matemáticas de 1º, 3º y 4º ESO Opción B, de dos centros distintos: IES Nuevo Milenio de Zalamea la Real (Huelva) e IES La Palma de La Palma del Condado (Huelva), durante los dos últimos cursos académicos. En conjunto, han diseñado y elaborado unas 80 actividades que gustosamente y con mucha generosidad compartimos y ponemos a disposición de la comunidad educativa para el estudio de las matemáticas.
Justificación de la propuesta. Contextualización
- Los tiempos han cambiado, es una realidad más que palpable.
- El contexto y la realidad educativa es bien distinta a la que teníamos en otros tiempos.
- El alumnado debe asumir un rol de protagonista, real, en la escuela y en la sociedad.
- El alumno debe ser constructor de su propio aprendizaje tomando un papel activo y de ‘actor principal’.
- El alumno debe convertirse en colaborador natural, ayudando y trabajando con el resto de compañeros y con su profesor de manera habitual, diseñando, elaborando y produciendo contenidos de acuerdo, complementando y potenciando, a lo enunciado en el punto anterior.
- Las clases de matemáticas necesitan un cambio de imagen (¿sólo las de matemáticas?).
- El profesor, docente, debe adaptarse a esta nueva realidad, realizando labores de análisis y diseño previo de sesiones en las que el alumnado debe conocer y tener claro todo aquello que se le solicita en este nuevo contexto y lo que se espera de él, ayudando, motivando y propiciando un clima, un ambiente de trabajo, que facilite esta nueva dinámica de trabajo del grupo-clase.
- Es imprescindible un verdadero cambio metodológico, que posibilite la consecución de los objetivos anteriormente listados.
- Las TIC han llegado para quedarse y son un aliado extraordinario, en cuanto a motivación y a facilidad para hacer que cada uno asuma su rol en esta nueva escuela.
Teniendo presente todo lo anterior, no queda otra que: ponerse manos a la obra.
Banco de actividades realizadas por los alumnos.
Pues eso es exactamente, lo que han hecho mis alumnos con mi apoyo, ponerse manos a la obra. Han diseñado, elaborado, producido y puesto a disposición de quien quiera usarlas, nada más y nada menos que, 80 actividades relacionadas con Funciones y Gráficas y Geometría.
Actividades de diversa tipología: test de problemas y conceptos, sopas de letras, actividades de completar huecos, mapas interactivos, adivinanzas, crucigramas, ordenación de palabras/letras… potenciando su creatividad, imaginación, capacidad de diseño, síntesis, escritura y saber hacer, manejando una herramienta nueva con total naturalidad y, por supuesto, todo ello bebiendo de sus conocimientos matemáticos adquiridos mediante el proceso de aprendizaje de la materia.
No quiero destacar ninguna en concreto. Todas se encuentran recopiladas a continuación.
¡Os animo a probarlas y a animar a otros alumnos, padres y madres y docentes a usarlas! (¿y por qué no?, a construir más y a compartir)
Aprovecho la ocasión para felicitar, de nuevo, a mis alumnos por la calidad de sus trabajos, su excelente predisposición para probar y evaluar las suyas y las de su compañeros, su buen hacer y, sobre todo, sus ganas de aprender haciendo y compartiendo.
Nuestro papel como docentes en esta era digital no es nada trivial puesto que. entre otros retos: debemos asumir un cambio de rol, de guía, gestor y corrector de las tareas pero dejando maniobrar libremente al alumnado, para que aprendan haciendo. Estas propuestas didácticas presentadas son una buena muestra de ello, de lo bien que desenvuelven y de lo a gusto que se sienten trabajando y desplegando sus conocimientos sobre un trabajo planificado previamente, pero llevado a cabo de principio a fin por ellos mismos, de manera autónoma. ¿Se puede pedir más?