Los tejidos artísticos, aunque menos conocidos por poco usuales, han sido muy importantes en la historia de las artes decorativas, especialmente por ser el medio de reproducción de grandes pinturas.
El tapiz es un tipo de tejido decorado con escenas policromas cuyo dibujo se integra en él mismo, de manera que se va formando al tiempo que el propio tejido.
La base del telar la constituye la urdimbre. Son una serie de hilos paralelos, sobre los que se va entrelazando otro hilo que constituye la trama. Esto se hace según el modelo, al que se denomina cartón, realizado por el pintor.