Francia fue una de las grandes ganadoras de la Guerra de los Treinta Años. El rey de Francia, Luis XIII, el rey de los tres mosqueteros, intervino en la contienda empujado por su ministro, el famoso cardenal Richelieu.

Al morir Luis XIII, subió al poder su hijo Luis XIV, que reinaría durante 72 años, pues era un niño de cinco años cuando heredó el trono. Su madre, la reina Ana, hija del rey de España Felipe III y hermana de Felipe IV, fue la regente durante los años de su minoría, aunque dejó el poder en manos del cardenal italiano Mazarino.