Suéñame la vida es un proyecto llevado a cabo por J. Daniel García y sus alumnos que nace de la colaboración con Toni Solano en El Quijote Sincopado, aunque fue realizado de manera paralela, podríamos decir que es un ejemplo más de cómo la metodología que se aplicó al proyecto colaborativo se puede extrapolar a cualquier libro de estudio en el aula.
El proyecto se realizó durante un curso, 2011-12 en Agora Portals International School, en 1º de Bachillerato. Consiste en partir de la lectura de una adaptación del clásico calderoniano La vida es sueño, para luego elaborar un guión literario-técnico y convertirlo en formato audiovisual, concretamente un stop motion o película de secuencia de imágenes fijas con ilusión de movimiento.
La metodología es muy similar a la que se llevó a cabo con El Quijote Sincopado, aunque es un poco más complejo y profundo: se abordó la tarea en grupos de entre 5 y 6 alumnos. Al finalizar la actividad, cada uno explicaba cuál ha sido su función dentro de la actividad, a través de la memoria. Para realizar correctamente esta sección, se exigía llevar un Diario de Trabajo.
Se dejó tiempo para la lectura del libro en casa, después cada grupo, decidía el acto y las jornadas que quería hacer para posteriormente representar su fragmento leído. Se reservaron una o dos sesiones para explicar el funcionamiento y desarrollo de los guiones para stop motion, al ser un grupo que no había trabajado nunca con la técnica se dedicó una sesión al visionado de estos cortos con una selección hecha por el profesor, lista disponible aquí.
Dentro de su formación audiovisual y literaria, se incluyeron en el proyecto dos comentarios: uno literario, en el que comentaban su fragmento, aquí se puede ver un ejemplo; otro, fílmico. Para este último, se trabajó con el material del Ministerio de Igualdad Cine para ser la voz del que calla, y se preparó un material para hacer análisis fílmicos, disponible aquí. Los estudiantes escogían un corto del material y hacían un análisis que luego colgaban en su blog, en esta página se puede consultar un ejemplo.
A continuación, el siguiente paso en el proyecto, buscando abarcar el máximo de estímulos posibles fue la conversión del fragmento que tenía cada grupo en una canción. Esto se hizo en dos fases, una primera improvisada en la que los estudiantes eran grabados y otra, una semana después, en la que se les volvía a grabar pero ya con una canción ensayada. Esta canción se la llevaban a casa y la editaban, para luego entregarla en un formato definitivo. Se pueden consultar las grabaciones aquí.
El siguiente paso fue establecer las fases para la realización del proyecto audiovisual, que son las mismas que las de El Quijote Sincopado, (acceder a la ficha del alumno).
Era obligatorio que los grupos elaboraran una memoria de todo el proceso. La música debía ser sin copyright y se les recomendaba la web Jamendo, para la descarga, aunque hubo un grupo que la compuso y grabó el mismo: El sol oscuro.
Como proceso complementario, en la tercera evaluación no sólo entregaban el vídeo definitivo sino que representaron la obra. El texto lo adaptaron ellos mismos a través de google.docs y gracias a un gran trabajo de los directores Pere Amer y Maria Martorell. Finalmente, un par de semanas antes del estreno, para completar algo más su expresividad corporal se realizó el siguiente ejercicio:
En una sesión de aula, se les dejaba 30 minutos para elegir un vídeo musical y tenían que improvisar un playback que se grababa. Posteriormente, se les dejaba una semana para volver a prepararlo y se volvía a repetir la actividad. Esta vez, el profesor los grababa y después editaba los vídeos eliminando el audio de la grabación y sustituyéndolo por las canciones que los estudiantes le proporcionaban, el resultado se puede consultar aquí.
Los roles que se necesitaban eran: guionista, director, productor ejecutivo, fotógrafo, actores/actrices, decorador, diseñador, técnico de sonido. Para la representación teatral, se incluyó: contabilidad, departamento de marketing y publicidad, infografía, atrezzo, vestuario y maquillaje.
Los recursos que se utilizaron fueron: adaptación de La vida es sueño de Vicens Vives, blog de aula, google.docs, videocámara, micrófono, altavoces, focos, software para la edición de vídeo o stop motion, proyector y pizarra digital.
En el proceso de evaluación, se valoró la corrección y la presentación de cada uno de los elementos del proceso (guiones, resúmenes, memorias...), así como la calidad de la exposición oral. También se valoró especialmente la originalidad en la tarea y la búsqueda de soluciones alternativas a las planteadas en clase.
Una vez establecido el proceso concreto para cada grupo, se elaboraba una rúbrica de evaluación que recoja cada uno de los criterios y se les entrega a los estudiantes.
Dado que esta actividad está enfocada como un proceso global que aglutina diversos objetivos, se prestó un especial interés en que queden recogidas todas las competencias básicas, detalladas en forma de habilidades o destrezas concretas. Además, durante la preparación de la obra de teatro se evaluaba el trabajo diario con la ayuda de los directores.