Te proponemos analizar detenidamente la estructura de sombra-luz, de dónde procede la luz, su dirección, puntos de máximo brillo sobre los objetos y el fondo. También fíjate en los lugares de penumbra y puntos donde la sombra es más intensa.
Si el volumen es curvo, la transición entre sombra y luz es graduada, es decir con muchos grados intermedios mientras que si los cantos son rectos se produce de modo tajante. Organiza esa graduación delimitando zonas de más o menos concentración de líneas en la trama.
Conviene que la forma de la trama de líneas reproduzcan la dirección de la superficie: si ésta es curva o recta las líneas también lo serán.