Ministerio de Educación, Política Social y Deporte
ESO, Educación Secundaria Obligatoria


España en el primer tercio del
siglo XX



REINADO DE ALFONSO XIII


El regeneracionismo


Conflictos políticos y sociales


Las crisis


La dictadura de Primo de Rivera


LA II REPÚBLICA


Protagonistas


Las fuerzas políticas


Fases de la República


Los problemas


LA GUERRA CIVIL


Operaciones militares


Dos modelos políticos enfrentados


Apoyos internacionales


Balance de la Guerra


6.

España en el primer tercio del siglo XX

Reinado de Alfonso XIII - Las crisis
Durante 1909 y 1917, la España de Alfonso XIII vivió dos de sus momentos más críticos y turbulentos:


La Semana Trágica. Los soldados que iban a suplir las bajas de la guerra marroquí promovieron desórdenes violentos cerca del puerto de Barcelona. Al mismo tiempo, los obreros convocaron una huelga general contra la guerra y paralizaron la ciudad, que quedó aislada, sin transportes, y bloqueada con barricadas. Casi la mitad de las iglesias y conventos de la ciudad fueron incendiados.

El motín fue reprimido militarmente. Hubo más de mil apresados y concluyó con el fusilamiento del maestro anarquista Ferrer Guardia, acusado de promover la rebelión. La repercusión mundial de esta ejecución obligó a Maura a dimitir.


En la crisis de 1917, confluyeron tres problemas:

  • El problema militar. El descontento de los militares por las derrotas en Marruecos, por los bajos salarios y el injusto sistema de ascenso, provocó la formación de Juntas de Defensa (sindicatos) que consiguieron imponer condiciones al gobierno y derribarlo.
  • El problema político. Tras el asesinato de Canalejas, los partidos turnistas entraron en crisis. Ante el caos gubernamental, una Asamblea de Parlamentarios se reunió en Barcelona pero fue disuelta por las autoridades, lo que agravó el malestar de la clase política.
  • El problema social. En agosto de 1917, a causa de la subida de precios provocada por la Guerra Mundial, se convoca una huelga general que fracasó por el apoyo de los militares al gobierno. Los líderes fueron encarcelados.
El sistema político quedó muy débil tras la crisis y, rompiendo las reglas de la Restauración, se formó un gobierno de concentración entre conservadores y liberales.