Captamos al primer golpe de vista los objetos que están más cerca de nosotros, los que aparecen completos (es decir, los que no están tapados por otros), los objetos de color más brillante y los que están más iluminados.
En cambio, los objetos más lejanos, los que aparecen ocultos y los que están menos iluminados o de colores apagados, es probable que nos pasen desapercibidos y no nos demos cuenta de su presencia. Observa en la imagen cómo nos fijamos más en el jarrón rojo, por su posición y tamaño respecto a los demás.
Por la necesidad
Imagina que vas en el autobús. El conductor del vehículo estará más atento a las señales de tráfico y a las maniobras del resto de conductores que tú. Al mismo tiempo, tu observarás imágenes de la realidad, como carteles publicitarios, escaparates, la gente paseando, etc., que al conductor pasarán totalmente desapercibidas.