Hemos visto que la realidad es tridimensional. Por tanto, si quisiéramos copiar un jarrón utilizando las tres dimensiones (altura, anchura y profundidad), una solución sería hacerlo en barro, utilizando un torno de alfarero. Es decir, utilizaríamos las mismas dimensiones que el jarrón en la realidad.
Sin embargo, si quisiéramos copiar el jarrón haciendo un dibujo en un papel, perderíamos la dimensión de profundidad, ya que el papel sólo tiene altura y anchura. El problema por tanto, sería el de fingir o trucar nuestro dibujo para que el jarrón que copiemos aparente volumen y profundidad.
A lo largo de esta unidad, trataremos de resolver cómo representar el volumen y el espacio de un objeto de la realidad, en un papel o plano que sólo tiene dos dimensiones.