Montesquieu, siguiendo a Locke, habló de la separación de poderes y el parlamentarismo para evitar tiranías, pero el gobierno debían ejercerlo los mejor preparados: los aristócratas.


Voltaire pensaba que la burguesía era la clase útil que debía protagonizar la política. Atacó las supersticiones de su tiempo y el poder de la Iglesia. Sus ideas tuvieron un enorme eco en su época.


Rousseau pensaba que el poder derivaba del pueblo, por lo que el legislativo debía estar por encima del ejecutivo, y así asegurar la democracia directa y la voluntad popular. Tuvo gran influencia en la Revolución francesa.

Un grupo de escritores al frente de los cuales estaban Diderot y D’Alembert con el fin de divulgar todo el saber de su tiempo, publicaron la Enciclopedia francesa: compendio razonado de las artes, las ciencias y los oficios.