La revolución de 1868 supuso la ruptura de un esquema político basado en la monarquía borbónica. Tras su caída se instauró un Gobierno provisional bajo cuyo mandato se diseñó una nueva constitución (1869) y se buscó un nuevo monarca que aceptase el juego democrático. La elección recayó en la dinastía de Saboya, pero, al quedarse ésta sin apoyos, se producirá el advenimiento de la Primera República.

El 8 de octubre de 1868 se constituyó el Gobierno Provisional de la revolución bajo la presidencia del general Serrano, que será nombrado Regente y con Prim como ministro de la Guerra.

El nuevo gobierno se enfrenta a:

• Juntas revolucionarias, partidarias de un sistema republicano.
  
  
• Convocatoria de elecciones a Cortes Constituyentes por sufragio universal masculino (mayores de 25 años). Triunfaron los partidos del gobierno (progresistas, demócratas y unionistas), que aprobaron una nueva constitución (junio de 1869), con presupuestos democráticos.
  
  
• Insurrección armada en Cuba, que se venía gestando antes de la revolución. Prim intentará la venta o la independencia de la Isla, enfrentándose a poderosos intereses coloniales.
  
  
• Búsqueda de un nuevo monarca para la corona vacante. Después de varias candidaturas y ser un pretexto para un conflicto europeo importante (Guerra Franco-Prusiana, 1870), finalmente se llega al consenso de las naciones europeas, y la elección y aprobación de las Cortes recae en Amadeo, de la casa de Saboya.