«---Quincena 2 ª-. Las palabras---»

Una historia contada por sustantivos

En este originalísimo poema, el poeta Guillermo Valencia se propone narrar una biografía completa usando casi exclusivamente sustantivos. Es un hecho insólito en la lengua, ya que son los verbos las palabras encargadas de transmitir la acción. El resultado es una historia esencial y sintética, aunque no por ello menos conmovedora y humana.


Cuna, Babero, Escuela, Libros, Tesis, Diploma.
Pobreza. Pleitos. Jueces, las Cortes, Ruido.
Comités, Elecciones. Tribuna. Gloria. Olvido.
Viajes. El bosque. Londres. París o Roma.

Regreso. Novia. Enlace. Rorros. Dientes. Aroma.
Ilusión. Señoritas. La sociedad. Marido.
Bailes. Celos. Pesares. Esclavitud. Gemido.
Nietos. Babero. Escuela. Griego. Latín y Doma.

Vejez. Gota. Desvelos. Desilusión. Novenas.
Ceguera. Gripe. Vértigos. Callos. Penas.
Abandono. Esquiveces. El patatús. La fosa.

Llanto. Duelo. Discursos. Decreto. Paz. Sonrisa.
Risa. Chalet. Pianola. Paseos. Una misa.
Tumba. Silencios. Ortigas. Ausencia. Cruz mohosa.


Guillermo Valencia, Obras poéticas completas. Aguilar, Madrid, 1948.
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El Nombre

Podemos definir el nombre como la clase de palabra que designa a seres o ideas. Dichos seres pueden ser vivos o inertes, o incluso pueden ser seres imaginarios.
Los nombres también pueden referirse a ideas, sentimientos o conceptos de una naturaleza mental. Son los nombres abstractos. Dichas realidades no son percibidas por los sentidos corporales (inocencia, libertad)
El resto de los nombres, que designan a seres con una entidad material, se denominan nombres concretos. Estos se clasifican a su vez en:
  • Propios: Son los que se refieren a individuos específicos dentro de una clase. Los nombres propios pueden ser antropónimos si se refieren a un ser humano (Juan, María...) o bien topónimos si se refieren a lugares (Madrid, Danubio).
  • Comunes: Aluden a una clase de seres o a un individuo no específico de ella (alumno, ciudad...).
En virtud de las características o de la naturaleza del objeto designado, los nombres admiten otras clasificaciones, a saber:
  • Nombres individuales: Son aquellos que, estando en singular, se refieren a un individuo (oveja, senador).
  • Nombres colectivos: Son aquellos que, estando en singular, se refieren a un grupo de individuos (rebaño, Senado).
  • Nombres contables: Designan realidades cuantificables mediante un número (dos libros, once años).
  • Nombres incontables: Designan realidades que no se pueden cuantificar directamente mediante un número (*dos petróleos, frente a dos barriles de petróleo).
  • Nombres animados: Se refieren a seres vivos (árbol, trucha).
  • Nombres inanimados: Se refieren a seres inertes (piedra, hierro).
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Adjetivos calificativos

Los adjetivos calificativos expresan cualidades de los sustantivos a los que se refieren. Pueden aparecer junto a dicho sustantivo (La mesa rota) o relacionarse con él a través de un verbo, normalmente copulativo (La mesa está rota).

I. Adjetivos variables e invariables


Según su capacidad para expresar el género, distinguimos dos clases de adjetivos.
  • Variables: Expresan la variación de género mediante morfemas flexivos.
    El gato blanco; La gata blanca.
  • Invariables: No tienen variación de género, aunque sí de número.
    El hombre feliz; La mujer feliz.
II. El grado del adjetivo

El grado es un rasgo del adjetivo que le permite expresar la intensidad con que se verifica la propiedad que expresa. Distinguimos tres grados:
  • Grado positivo: Simplemente se afirma una cualidad.
    Marta es guapa.
  • Grado comparativo: Se confronta la misma cualidad en dos sujetos. El comparativo puede expresar superioridad, inferioridad o igualdad.
    Luis es más listo que Iván (Superioridad).
    Pedro es menos impulsivo que Sergio (Inferioridad).
    María es tan competente como Tomás (Igualdad).
  • Grado superlativo: La cualidad se verifica en su máximo nivel. Si ese máximo nivel se verifica dentro de un grupo delimitado, hablamos de superlativo relativo. En caso contrario, es un superlativo absoluto.
    Cristina es la más competente del equipo (Superlativo relativo).
    Cristina es muy lista / listísima (Superlativo absoluto).

Adjetivos determinativos

Son palabras que acompañan al nombre para delimitar su significado.
Distinguimos las siguientes clases:
Artículos: Delimitan lo denotado por el sustantivo y lo individualizan dentro de una clase.
  • Determinados: He visto el coche de Luis
  • Indeterminados : He comparado un coche
Demostrativos: Indican la distancia en el espacio o en el tiempo.
  • Cercanía: Este, esta, estos estas.
  • D. Media: Ese, esa, esos, esas.
  • Lejanía: Aquel, aquella, aquellos, aquellas.
Posesivos: Expresan la propiedad.
  Primera persona Segunda persona Tercera persona
Un poseedor mi, mío /mía,
mis, míos/ mías
tu, tuyo / tuya
tuyos / tuyas
su, suyo / suya
sus, suyos / suyas
Varios poseedores nuestro /nuestra
nuestros /nuestras
vuestro /vuestra
vuestros / vuestras
su, suyo/ suya
sus, suyos /suyas
Numerales: Indican de forma precisa una cantidad (cardinales) u orden (ordinales).
  • Cardinales: uno /una, dos, tres, cuatro...
  • Ordinales: primero, segundo, tercero...
Indefinidos: Expresan una cantidad de forma imprecisa:
algunos, varios, bastantes, todos, muchos, pocos...

Exclamativos: Expresan admiración.
¡Cuántos regalos!; ¡Qué calor!

Interrogativos: Introducen una pregunta directa o indirecta.
¿Qué equipo ha ganado?; No sé cuántos hombres son.

Date cuenta de que los adjetivos interrogativos conservan la tilde aunque fucionen dentro de una oración interrogativa indirecta.
No sé qué equipo ha ganado.

Los pronombres

Son palabras que sustituyen a los nombres y asumen sus funciones sintácticas. Distinguimos las siguientes clases de pronombres:

Personales: Señalan a las personas que intervienen en la comunicación: el emisor (primera persona), el receptor (segunda persona), o un referente (tercera persona). Los pronombres personales varían según la función sintáctica a la que se destinan.

  Sujeto CD CI CC
1ª Persona yo
nosotros/as
me, nos me, nos mí (con prep) / conmigo
2ª Persona tú /usted
vosotros/as, ustedes
te
nos
os
nos
ti, contigo (con prep)
3ª Persona él, ella, ello
ellos, ellas
se, lo (le), la se, le, sí (con prep), consigo
nos
Demostrativos: Son formas idénticas al determinativo, a excepción del neutro.
  • Cercanía: Este, esta, esto, estos estas.
  • D. Media: Ese, esa, eso, esos, esas.
  • Lejanía: Aquel, aquella, aquello, aquellos, aquellas.
Posesivos: Idéntico al determinativo, pero excluyendo las formas átonas.
  Primera persona Segunda persona Tercera persona
Un poseedor mío /mía,
míos/ mías
tuyo / tuya
tuyos / tuyas
suyo / suya
suyos / suyas
Varios poseedores nuestro /nuestra
nuestros /nuestras
vuestro /vuestra
vuestros / vuestras
suyo/ suya
suyos /suyas
Numerales: Indican de forma precisa una cantidad (cardinales) u orden (ordinales).
  • Cardinales: un /una, dos, tres, cuatro...
  • Ordinales: primero, segundo, tercero...
Indefinidos: Sus formas son idénticas a las del determinativo:
algunos, varios, bastantes, todos, muchos, pocos...

Exclamativos: Expresan admiración.
¡Cuántos han venido!

Interrogativos: Introducen una pregunta directa o indirecta.
¿Qué ha sido?; No sé cuántos son.
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El verbo

El verbo es la palabra que designa acciones o estados. Además aporta información de tiempo (presente, pasado o futuro), modo (indicativo, subjuntivo o imperativo) y aspecto (perfecto o imperfecto). La función principal del verbo es la de núcleo del predicado. Cuando la ejerce, debe concordar con el sujeto en número (singular o plural) y persona (primera, segunda o tercera).

El verbo se estructura en un lexema, parte invariable que aporta el significado léxico, y desinencias, que concretan toda la información gramatical a la que nos referíamos más arriba (tiempo, modo, aspecto, etc.). En las formas compuestas, dicha información gramatical se contiene en el verbo auxiliar haber. Así, en la forma verbal cantábamos:

cant- es el lexema, que expresa la acción.
-a- es la vocal temática, e indica que se trata de la primera conjugación.
-ba- indica tiempo pasado y aspecto imperfecto (acción inacabada).
-mos aporta la información sobre persona (primera) y número (plural).

No todas las formas verbales poseen esta información gramatical de forma completa. Llamamos formas no personales a aquellas que carecen de rasgos de persona y número. Son las siguientes:
  • Infinitivo: A veces funciona como un sustantivo. Fumar es malo.
  • Gerundio: Puede tener valor adverbial. Se fue volando.
  • Participio: Equivale a un adjetivo. Juan está cansado.
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Las perífrasis verbales

Existen matices gramaticales que no pueden ser expresados por las desinencias y verbos auxiliares convencionales. En estos casos, recurrimos a otros verbos que quedan despojados de su significado habitual para actuar como auxiliares más precisos, mientras que el verbo principal aparece en infinitivo, gerundio o participio. Este tipo de construcciones verbales recibe el nombre de perífrasis.
Existen dos clases de perífrasis:

I.Perífrasis modales: Aportan matices sobre la actitud del hablante.

Obligación: Expresan algo que el hablante entiende como un deber.
  • Tener que + infinitivo: Mañana tengo que trabajar.
  • Deber + infinitivo: Ahora debes partir.
  • Haber que + infinitivo: Hay que llevar un regalo.
  • Haber de + infinitivo: Hemos de ser inflexibles.
Posibilidad: Expresan algo que el hablante entiende como posible o probable.
  • Poder + infinitivo: La bomba puede estallar.
  • Deber de + infinitivo: El jefe debe de haber llegado ya.
II. Perífrasis aspectuales: Concretan matices referentes al comienzo, fin o desarrollo de la acción verbal.

Perfectivas: Tiene que ver con el fin de la acción verbal.
  • Acabar de + infinitivo: Acabo de llegar a casa.
  • Dejar de + participio: Pedro ha dejado de fumar.
  • Tener + participio: Mi madre tiene preparado el contrato.
  • Llegar a + infinitivo: Llegó a decir que me fuera a casa.
Incoativas: Expresan una acción cuyo comienzo es inminente.
  • Ir a + infinitivo: El atleta va a saltar.
  • Estar a punto de + infinitivo: Mis padres están a punto de llegar.
  • Ponerse a + infinitivo: Juan se puso a estudiar en serio.
  • Echarse a + infinitivo: Mis amigos se echaron a reír.
Frecuentativas: Expresan una acción que se repite.
  • Soler + infinitivo: Mi abuelo suele fumar en pipa.
  • Volver a + infinitivo: En primavera volveré a hacer alpinismo.
Durativas: Muestran la acción en su transcurso.
  • Estar + gerundio: Si me buscan, estaré estudiando.
  • Seguir + gerundio: Sigo trabajando en lo mismo.
  • Llevar + gerundio: Este señor lleva esperando una hora.

El adverbio

Los adverbios son palabras invariables que complementan generalmente a un verbo (Llegaré mañana), aunque también pueden modificar el significado de un adjetivo (Soy bastante feo) o de otro adverbio (Conducen muy deprisa).
Según su significado, los adverbios se clasifican de la siguiente manera:

  • Lugar: Aquí, allí, acá, delante, detrás, cerca (de), lejos (de), encima (de)...
  • Tiempo: Ahora, luego, mañana, antes(de), después (de), siempre...
  • Modo: Bien, mal, regular, así, deprisa, despacio...
  • Cantidad: Más, muy, bastante, poco, demasiado, apenas...
  • Afirmación: sí, bueno, seguro, naturalmente...
  • Negación: no, jamás, tampoco...
  • Duda: Quizás, acaso, probablemente...
Una forma de producir nuevos adverbios es añadir el sufijo -mente a adjetivos. Por ejemplo, del adjetivo lento formamos el adverbio lentamente. Recuerda que los adverbios acabados en -mente solo llevan tilde si la lleva el adjetivo del que proceden.

Una locución adverbial es un grupo indivisible de palabras que se comporta igual que un adverbio.
A lo mejor han llegado = Quizás han llegado.
Es la mar de tonto = Es muy tonto.
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Elementos relacionantes: Preposiciones y Conjunciones

I. Preposiciones
Las preposiciones son elementos lingüísticos que sirven de enlace entre palabras y grupos de palabras. Constituyen una clase cerrada formada por los siguientes elementos:

A, ante, cabe*, con, contra, de, desde, durante,
en, entre, hacia, hasta, mediante,
para, por, según, sin, so, sobre, tras.
(*La preposición cabe es arcaica y significa "junto a".)

Las locuciones prepositivas son grupos de palabras, inseparables entre sí, que actúan de forma análoga a una preposición. Algunas de ellas son : A causa de, de acuerdo con, a fin de, junto a, acerca de...

II. Conjunciones
Las conjunciones y locuciones conjuntivas enlazan entre sí a palabras, grupos sintácticos e incluso oraciones. Distinguimos:
  • Conjunciones coordinantes: Copulativas (y, e, ni, que); disyuntivas ( o, u); adversativas (mas, pero, sino, aunque), consecutivas (así que, conque, luego, por tanto) y explicativas (es decir, o sea, esto es).
  • Conjunciones subordinantes: Completivas (que, si), causales (porque, como, pues, ya que, dado que...), finales (para que, a fin de que..), concesivas (aunque, por más que, por mucho que...), comparativas (más... que, menos... que, tan... como ), temporales (cuando, en cuanto, tan pronto como...), condicionales (si, como, cuando, con tal de que…).
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Familia léxica y campo semántico

I. Familia léxica
Llamamos familia léxica a un conjunto de palabras que comparten un mismo lexema. Por ejemplo, a partir de la palabra BARCO, podemos formar:

barquito,barquero barcaza
embarcar, embarcación,
desembarcar...


II. Campo semántico
El concepto de campo semántico, por el contrario, se basa en la existencia de un núcleo común de significado más o menos aceptado. Así, BARCO generaría un campo semántico que incluiría palabras como:

Timón, mástil, camarote
popa, ancla
amarras...


Todas estas palabras comparten una nota semántica ,"partes de un barco", al mismo tiempo que cada una de ellas se opone a las demás por otras notas, con lo que acaba formándose un pequeño sistema de relaciones semánticas.
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Polisemia, Sinonimia y Antonimia

Las palabras de un idioma no son realidades aisladas, sino que establecen entre sí toda una red de relaciones semánticas. La polisemia, la sinonimia y la antonimia son tres de las más frecuentes en cualquier lengua.

I. Polisemia: Existe cuando una palabra, casi siempre por razones históricas, va acumulando nuevos significados. Es el caso de banco, que en un principio se refería a un asiento, y que en la actualidad se refiere también a las entidades financieras (Banco Mundial) y, por extensión, a cualquier acumulación de alguna materia (Banco de peces, banco de sangre, banco de datos...).

II. Sinonimia: Se produce cuando dos palabras, denominadas sinónimos, tienen el mismo significado. Es el caso de empezar y comenzar, flaco y delgado...
No es habitual que dos sinónimos puedan intercambiarse en todos los contextos. En este caso hablamos de sinónimos absolutos.

III. Antonimia: Existe cuando dos palabras, denominadas antónimos, tiene significados opuestos. Según la manera en que establezca dicha oposición, distinguiremos:
  • Antónimos de grado: Aquellos que podrían formar parte de una escala de intensidad.
    caliente y frío (puede existir templado).
  • Antónimos complementarios: La afirmación de uno excluye a su contrario, pues son incompatibles
    hombre y mujer, vivo y muerto.
  • Antónimos inversos: La existencia de uno implica la de su contrario.
    marido y esposa, comprar y vender.
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El cambio semántico. Metáfora y Metonimia

Las lenguas son realidades vivas, que van transformándose de forma paralela a las comunidades humanas que las utilizan. Aparecen palabras nuevas (neologismos) al tiempo que otras van quedando en desuso (arcaísmos). En otros casos, palabras ya existentes reciben nuevos significados. Son muchos los fenómenos lingüísticos que dan lugar al cambio semántico, entre ellos la metáfora y la metonimia.

I. Metáfora:
Aunque probablemente la conocerás por su uso literario, lo cierto es que en la lengua convencional es un potente factor de cambio semántico. Se da cuando existe una relación de semejanza entre los referentes de dos palabras distintas. Por ejemplo, llamamos ratón al periférico del ordenador que usamos para mover el cursor de la pantalla por su semejanza con el pequeño roedor.

II. Metonimia:
El cambio semántico se produce por la proximidad (física o conceptual) entre los referentes de dos palabras. Es el caso de la palabra cuello que ha pasado a designar también la parte de una camisa u otra prenda de vestir que está en contacto con esa parte del cuerpo. Otras relaciones que dan lugar a metonimia son:
  • Todo por la parte. La ciudad de Madrid se echó a la calle.
  • Parte por el todo. Dos cabezas de ganado.
  • Procedencia. Beberemos un rioja.
  • Operador de un instrumento. El cámara de TV.
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Procedimientos morfológicos de formación de palabras

Además de los procedimientos de cambio semántico estudiados en la página anterior, la lengua posee sus propios mecanismos para formar neologismos con los que renovarse. Se trata de la derivación, la composición y la parasíntesis. A ellas se suman la formación de siglas y acrónimos.
  • Derivación: consiste en añadir afijos a una raíz léxica. Los afijos pueden ser
    a) prefijos (re-hacer),
    b) sufijos (volcán -ico)
    c) interfijos (pan -ec- illo).

  • Composición: consiste en unir dos o más raíces léxicas. Es el caso de mata + moscas, medio + día o limpia + para + brisas. Sobre una palabra ya compuesta (para + caídas) podemos aplicar la derivación (para + caíd + ista), pero la palabra se sigue considerando compuesta.

  • Parasíntesis: consiste en unir más de dos elementos compositivos de forma simultánea. Es el caso de en + cárcel + ar (no existe *encarcel ni * carcelar) o siete + mes + ino (no existe *sietemes ni *mesino).

  • Siglas y Acrónimos: así denominamos a las palabras formadas a partir de letras tomadas de distintas palabras. Es el caso de OLP (Organización para la Liberación de Palestina) o FCT (Formación en Centros de Trabajo).
    Cuando las siglas pueden leerse silabeando, como cualquier otra palabra, se denominan acrónimos. Es el caso de AVE (Alta Velocidad Española) o ERE (Expediente de Regulación de empleo).
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1. Clasifica los siguientes nombres según los criterios estudiados en la página 1: paz, coliflor, Federico, oxígeno, equipo, Boston, sol.
2. Clasifica los siguientes adjetivos en variables e invariables: verde, ambicioso, feliz, blanco, rápido, responsable.
3. En las siguientes oraciones, especifica el grado del adjetivo:
  • Joe es el pistolero más rápido del valle.
  • Ten paciencia, soy mucho más viejo que tú.
  • Eres tan testaruda como tu madre
  • He visto a Juan con una joven guapísima.
4. Analiza morfológicamente las palabras resaltadas en el siguiente texto:

¡Amar! Había nacido para soñar el amor, no para sentirlo. Amaba a todas las mujeres un instante; a esta, porque era rubia; a aquélla, porque tenía los labios rojos; a la otra porque se cimbreaba, al andar, como un junco. Algunas veces llegaba hasta el punto de quedarse una noche entera mirando a la luna, que flotaba en el cielo entre un vapor de plata, o a las estrellas, que temblaban a lo lejos como los cambiantes de las piedras preciosas. En aquellas largas noches de poético insomnio, exclamaba: "Si es verdad, como el prior de la Peña me ha dicho, que es posible que en ese globo de nácar que rueda sobre las nubes habitan gentes, ¡qué mujeres tan hermosas serán las mujeres de esas regiones luminosas! ¡Y yo no podré verlas, y yo no podré amarlas!... ¿Cómo será su hermosura?...¿Cómo será su amor?"

(Gustavo-Adolfo Bécquer, El rayo de luna)
5. Relaciona ambas columnas 1-B.
             1. Amé
2. habéis comido
3. hubieras amado
4. partiríamos
5. partiéremos
6. habríamos comido
A. pretérito pluscuamperfecto de subjuntivo
B. pretérito perfecto simple
C. pretérito perfecto compuesto de indicativo.
D. futuro simple de subjuntivo
E. condicional simple
F. condicional perfecto

6. Localiza y clasifica las perífrasis presentes en el siguiente texto:

Una vez unos niños estaban jugando detrás de una casa a la pelota. En esto un hombre abrió la ventana y se puso a reñirles. Los niños no tenían que gritar tan alto. Entonces ellos se fueron a la calle a jugar con sus patinetes. El hombre volvió a abrir la ventana y les regañó. Los niños no tenían que tocar timbres ni bocinas. Entonces ellos se fueron al parque a jugar con una cuerda.

Úrsula Wölfel, Veintiocho historias de risa

7.Localiza seis palabras del campo semántico del mar en este texto:

Quizás también el aspecto melancólico de la isla, con sus bosques cenicientos y sus picos rocosos y salvajes, y el espumar tronante de la resaca contra la orilla aumentaban mi malestar. El hecho es que, a pesar del radiante sol, el alboroto de las aves marinas, que se zambullían y chillaban a nuestro alrededor, y la perspectiva de poder por fin poner pie a tierra después de tanto tiempo, me notaba el corazón oprimido y empecé a odiar a la Isla del Tesoro desde la primera mirada.
Teníamos por delante una mañana de duro trabajo: había que botar las lanchas y arrastrar el barco a remolque tres o cuatro millas para doblar la punta de la isla y alcanzar el puerto detrás del islote del Esqueleto. Los hombres, doblados por la faena, gruñían rabiosamente.
Hasta ese día habían hecho su trabajo de buena gana y sin protestar; pero la simple vista de la isla había bastado para relajar la disciplina.


Robert Louis Stevenson, La Isla del Tesoro.

8. Explica el procedimiento de formación de palabras que ha dado lugar a:
  • salvavidas
  • embarcar
  • rocoso
  • E.S.O
  • paracaidista



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Fichero Adjunto:

Dámaso Alonso: La invasión de las siglas

USA, URSS. 
USA, URSS, OAS, UNESCO:
ONU, ONU, ONU.
TWA, BEA, K.L.M., BOAC
¡RENFE, RENFE, RENFE!
FULAS, CARASA, RULASA,
CAMPSA, CUMPSA, KIMPSA;
FETASA, FITUSA, CARUSA,
¡RENFE, RENFE, RENFE!
¡S.O.S.,S.O.S.,S.O.S.!
¡S.O.S.,S.O.S.,S.O.S.!
Vosotos érais suaves formas:
INRI, de procedencia venerable,
S.P.Q.R., de nuestra nobleza heredad.
Vosotros nunca fuisteis invasión.
Hable
al ritmo de las viejas normas,
de mi corazón, [...]
Legión de monstruos que me agobia,
fríos nadamiajes en tropel:
yo querría decir madre, amores, novia ;
querría decir vino, pan, queso, miel.
¡Qué ansia de gritar
muero, amor, amar!
Y siempre avanza:
USA, URSS, OAS, UNESCO,
KAMPSA, KUMPSA, KIMPSA,
PETANZA, KUTANZA, FUTRANZA...
¡S.O.S., S.O.S.,S.O.S.!
¿Oh, Dios, dime,
hasta que yo cese, 
de esta balumba
que me oprime,
no descansaré?
¡Oh dulce tumba:
una cruz y un R.I.P.!