Las raíces. La Hispania romana LOS TIEMPOS PREHISTÓRICOS Paleolítico inferior El Neolítico en la península ibérica La Edad de los Metales LOS PUEBLOS COLONIZADORES Fenicios Griegos LOS PUEBLOS AUTÓCTONOS PENINSULARES Celtas Iberos Tartesos LA COLONIZACIÓN ROMANA La conquista romana Romanización LA MONARQUÍA VISIGODA Unidad territorial Unidad legislativa Unidad religiosa

1. Las raíces. La Hispania romana Los tiempos prehistóricos - El Neolítico en la península ibérica La revolución que significó que el hombre descubriera el cultivo de las plantas y la domesticidad de los animales, es decir, la agricultura y la ganadería, llegó también a la Península Ibérica. Su llegada fue con milenios de retraso respecto a los inicios en las cuencas del Nilo y del Eufrates y Tigris. No se sabe bien si el conocimiento de la agricultura se produjo por transmisión de otros pueblos o por propia evolución de los hombres que vivían en este territorio, que llegaron a darse cuenta del proceso evolutivo de las plantas. Es probable que se conociera primero la domesticación de los animales (cerdo, buey, oveja, cabra, caballo), y después se iniciara el cultivo de plantas, en concreto de cereales como la cebada y el trigo. Para conocer los avances técnicos de los hombres de ese tiempo hay que fijarse en los instrumentos que utilizaban, así como en la cerámica que fabricaban, sin olvidar los lugares y formas de enterramiento, pues las huellas que el hombre ha dejado en las necrópolis suele se la mejor, o única, forma de conocer el mundo de los vivos. La industria lítica de este tiempo introdujo la técnica de la talla pulida, y así se encuentran hachas elaboradas con esa técnica. Muchos de los instrumentos que construía el hombre de este tiempo eran de hueso: agujas, cucharas, espátulas, mangos, punzones. Uno de los inventos más importantes del Neolítico, la cerámica, podría haberse conocido en la Península Ibérica gracias a las influencias de pueblos de fuera. En cualquier caso, comienzan a aparecer algunos cuencos de cerámica en los primeros yacimientos de la época neolítica, y durante los milenios de desarrollo de esta cultura hay una evolución considerable de las técnicas cerámicas. Como la etapa Neolítica en la Península Ibérica es muy larga (su cronología puede extenderse desde el 5.000 al 3.000 a. C., o según otros autores desde el 6.000 al 2.000 a. C.), habría que incluir dentro del Neolítico, las pinturas esquemáticas del Levante español.