- Recuerde que el individuo es sustituible,
la persona insustituible.
- La comunidad no es la sociedad. En la comunidad tiene preferencia
lo común, en la sociedad lo personal.
- Distinga bien entre nación, sociedad política y Estado.
No olvide que el Estado debe estar siempre al servicio de la sociedad
(política).
- El hombre al pertenecer a una sociedad hace una promesa tácita
de obedecer a las leyes sostiene el contrato de ciudadanía platónico.
Aristóteles, sin embargo, dice que el Estado es una exigencia
de la naturaleza social del hombre.
- La teoría del bien común incide en que el Estado debe
ayudarnos a buscar el bien común. Hobbes, considera que somos
esencialmente asociales y necesitamos de un contrato de comunidad para
mantener la paz.
- La teoría del contrato de gobierno reconoce que somos seres
sociales pero la sociedad civil y el Estado surgen de un contrato de
gobierno. Rousseau asienta su teoría en la voluntad general. El
hombre se ha corrompido y necesita que mediante el acuerdo de la superioridad
de la voluntad general restaurar su naturaleza corrupta.
- Ni el pueblo, ni el Estado son soberanos. Ambos deben estar al servicio
de la persona que es lo único absoluto.
- El Estado debe tener como fin el desarrollo de la persona, de cada
persona (bien común), por lo tanto no vale todo y debe tener como
fundamento el respecto absoluto a la persona concretado en el respeto
a sus derechos fundamentales.
- El totalitarismo, sea del tipo que sea, es siempre un atentado contra
la dignidad de la persona. La democracia, es el mejor sistema político
inventado hasta ahora, pero la democracia no debe perder el norte debe
tener como norte a la persona.
- Recuerde el origen del término utopía: “un lugar
en ningún lugar”. Aproxímese a la obra de Tomás
Moro y a su vida.
- No olvide que la utopía es expresión de la aventura
moral del ser humano, tiene una función crítica –demoledora
y constructiva- y que toda utopía es “idealista” pero
luchando por el “realismo”. Toda utopía quiere que
la realidad social y de desarrollo moral del hombre sea mejor.
- La dimensión utópica es esencial al ser humano. No se
puede renunciar a ella más que renunciando a ser persona. No olvide
que debe alimentar u capacidad de utopía para crecer como persona.
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