Importancia
Puesto que la tecnología que permite las comunicaciones públicas (radio, televisión) son ondas electromagnéticas, muy semejantes a las empleadas en la comunicación privada (teléfono), las conversaciones llevadas a cabo por un teléfono móvil pueden recibirse con un dispositivo no mucho más sofisticado que un aparato convencional de radio.
Las conversaciones telefónicas están protegidas por el derecho a la intimidad, que sólo puede vulnerarse mediante una orden judicial en el caso de que su escucha favorezca la investigación de la policía o las fuerzas de seguridad del estado. De no darse ese caso, la escucha y todavía más la difusión de conversaciones privadas va contra la ley, al igual que manipular o curiosear el teléfono móvil de otra persona sin su permiso.
|
|