Isabel García López. EDA 2005
Antes de comenzar la experiencia tenía la impresión de que trabajar con Descartes iba a favorecer sobre todo a alumnos con ciertas dificultades de aprendizaje de las Matemáticas. Pero después de la experiencia tengo la impresión totalmente contraria. Los alumnos con mayores dificultades son incapaces de trabajar de forma autónoma y necesitan mucha dependencia del profesor en la clase. Por parte de estos alumnos los comentarios son totalmente de rechazo al trabajo con ordenadores; a pesar de que en la encuesta inicial todos pensaban que sería buenísimo aprender con ellos. Los alumnos con menores dificultades de aprendizaje se han adaptado por el contrario muy bien a la experiencia y han tenido la posibilidad de ampliar y trabajar de forma más rápida sin tener que esperar a los demás.