El sonido, a diferencia de otras "perturbaciones" que se
propagan en medios materiales, lo hace tridimensionalmente, es
decir la "perturbación" llega a cualquier punto del espacio.
Por ser una onda mecánica, la rapidez de su propagación
depende del medio de propagación elástico.
La velocidad de
propagación de la perturbación, dependerá de la proximidad de
las partículas del medio y de sus fuerzas de cohesión. Así, la
velocidad de propagación será mucho mayor en los sólidos
que en los líquidos, y sobre todo, que en los gases.
A la presión normal de 1 atm y 20ºC, en un ambiente seco, la
velocidad del sonido es de 5600 m/s en el acero, 1460 m/s en el
agua y 340 m/s en el aire.