LORD KELVIN

Corría el año 1848 cuando un científico de Irlanda del Norte llamado Wlliam Thomson (1824-1907) propuso que para medir la temperatura de los cuerpos se utilizase una nueva escala que comenzara a contar justamente en el llamado cero absoluto Por entonces ya se había calculado que la temperatura tiene un límite natural, por debajo del cual es imposible descender. Ese límite estaba establecido en -273 ºC, o sea, a 273 ºC bajo cero. William Thomson era profesor de física en la Universidad de Glasgow desde los veintidós años, a los treinta y cuatro había sido nombrado sir y en 1892 decidieron nombrarle lord. Puesto que desempeñó un papel importante en el tendido del primer cable transatlántico, se pensó en adoptar para él el título de lord del Cable, pero finalmente el propio interesado propuso que se lo concedieran como lord Kelvin, en recuerdo del pequeño río sobre cuya ribera está asentada la Universidad de Glasgow Y así no sólo ha pasado ese nombre a la historia  de la física para identificar a William Thomson, sino también para denominar la unidad de la escala absoluta de temperaturas.