El fin de la gloria del mundo (1672), Juan Valdés Leal. Hospital de la Caridad, Sevilla

El fin de la gloria del mundo

Juan Valdés Leal

1672

Hospital de la Caridad, Sevilla

 

En la alegoría Finis gloriae mundi o «El fin de las glorias mundanas» dos cadáveres en descomposición en el interior de una cripta son mostrados; un caballero de la Orden de Calatrava y un obispo yacen muertos en proceso de putrefacción mientras aguardan el Juicio Final. La fama, la gloria y las riquezas terrenales de nada les ha servido. Sobre el fondo aves nocturnas, lechuzas y murciélagos. En esta obra de composición triangular se muestra una balanza sujeta por la mano de cristo en clara alusión al Juicio Final; sobre un plato los siete pecados capitales, sobre el otro elementos relativos a la virtud, la oración y la penitencia. En sendas leyendas sobre cada uno de éstos leemos «ni mas» «ni menos».

Su pintor, Valdés Leal, fue uno de los máximos representantes de la pintura del Barroco andaluz junto a Murillo. Poseyó éste un estilo barroco de tendencia tenebrista. La temática macabra y grotesca es retratada de manera muy expresiva. Este cuadro pertenece al conjunto de lienzos que pintó para el Hospital de la Caridad de Sevilla por encargo de don Miguel de Mañara, su fundador. Ambos forman parte de un estudiado programa iconográfico sobre la práctica de la caridad. Junto con In ictu oculi o «En un abrir y cerrar de ojos» forman los jeroglíficos de las postrimerías. Ambas reflexionan sobre la vanitas, la brevedad de la vida terrena y el triunfo de la muerte. La muerte acaba por privar al ser humano de todos los bienes terrenales, para salvar el alma humana será necesario el ejercicio de la penitencia y de la caridad.