Santiago apóstol fue el primero en sufrir el martirio por decapitación tras su regreso a Jerusalén después de evangelizar España. Sus discípulos devolvieron su cadáver cargado en una barca a tierras gallegas, según deseo expreso de Santiago, y allí le dieron sepultura. Su tumba fue encontrada en el siglo IX dando origen a la denominación «campus estellae» y de aquí Santiago de Compostela. Su iconografía varía apareciendo representado como peregrino con sombrero, concha o vieira, bastón y alforja o representado a caballo como «Santiago Matamoros» .