El Conde-duque de Olivares (1638), Diego Velázquez. Museo del Prado

Gaspar de Guzmán, conde-duque de Olivares, a caballo

Diego Rodríguez de Silva y Velázquez

1632

Museo del Prado, Madrid

 

 

Retrato propagandístico del Conde Duque de Olivares, valido de Felipe IV, a caballo en corveta. Esta maniobra de «corveta» estaba reservada para la representación de los reyes, por lo que llama la atención la osadía de Olivares para ser retratado de este modo. Se representa además con armadura, banda, sombrero y bengala de general, lo que indica y referencia su condición de jefe de los ejércitos. Sería, sin lugar a dudas, uno de los personajes centrales y protagonistas de la crisis de la Monarquía española durante el siglo XVII. Dominó la política española durante años como valido real de Felipe IV. Inició una serie de políticas y reformas interiores que le granjearon la enemistad de nobles, pero también de Cataluña y Portugal. Tras su caída y destitución por Felipe IV en 1643 se retiró a Toro donde murió un año más tarde.