VALORACIÓN FINAL
EXPERIMENTACIÓN DESCARTES ANDALUCÍA
Tras la experimentación de la utilización de Descartes en las aulas, se ha realizado una encuesta final para valorar el grado de aceptación y participación del alumnado en las prácticas que se han propuesto.
Los profesores Jesús Fernández y José Muñoz han llevado a cabo la experimentación con dos grupos de 3º de E.S.O. En ambos casos han contestado la encuesta 18 alumnos (aunque en la experimentación el número fue superior). Las preguntas de puntuación y su resultado medio han sido las siguientes:
En el siguiente gráfico aparece una comparación entre los dos grupos respecto a las medias de resultados.
Se puede comprobar que en casi todas las preguntas están los resultados sobre el 3'5 (sobre 5) salvo en la pregunta 27, que es lógico que baje la puntuación porque pregunta si han tenido algún inconveniente a la hora de realizar las actividades. En la última pregunta también baja el resultado porque como comentaron los alumnos muchos no tienen Internet en su casa y eso hizo que bajaran la puntuación.
Respecto a la forma como han trabajado en clase (pregunta 15 de la encuesta), decir que todos los alumnos menos tres (que trabajaron solos) han trabajado en parejas. Las respuestas afirmativas o negativas a la forma de trabajo han sido las siguientes:
Aparte de las anteriores, se les hizo algunas preguntas abiertas para que ellos se expresaran a su gusto.
Respecto a la parte positiva podemos decir que la mayoría de los alumnos que las contestaron expresaron su satisfacción con la experiencia. Se recogieron muy pocos aspectos negativos.
A continuación planteamos las respuestas que hemos recogido. No están ordenadas sino que se han ido añadiendo una detrás de la anterior respuesta sin importar como caían.
VALORACIÓN PERSONAL DE LOS PROFESORES
Atendiendo a la encuesta final pasada a los alumnos y a la observación directa en el aula de informática nuestra opinión es que la experiencia ha sido gratificante para los alumnos. En general los alumnos han tenido poca dificultad para manejar las escenas y resolver las actividades. La gran dificultad que hemos encontrado es la carencia que tienen hoy día nuestros alumnos de destrezas lectoras por lo que algunos han tenido problemas para entender algunos enunciados o algunas explicaciones. Creemos que es conveniente, antes de utilizar las unidades didácticas, revisar muy bien las explicaciones y enunciados de tareas y adecuarlas al nivel del alumnado con el que se cuenta.
Como se recoge en las respuestas de los alumnos, hubo que realizar pocas explicaciones. La ventaja de este método es que al haber muchos alumnos que trabajan independientemente sin necesidad del profesor, éste puede dedicar su atención a los alumnos que presentan más dificultad en el aprendizaje.
Comparando el trabajo con el ordenador frente al trabajo cotidiano en clase, pueden encontrarse algunas diferencias significativas:
Aunque al principio el avance es más lento, en cuanto que los alumnos han aprendido lo que deben hacer, el ritmo de aprendizaje suele ser más rápido.
Como les resulta en general más entretenido este método y pasan a ser sujetos activos más que pasivos, la satisfacción de los alumnos al final aumenta.
En la clase normal los alumnos pueden seguir el ritmo que marca el profesor a pesar de las dificultades que tengan, ya que el profesor explica a todo el grupo lo que deben de hacer. En la clase en el aula de informática, al ser cada alumno autónomo, si se plantea alguna dificultad necesita la ayuda expresa del profesor y si eso ocurre en varios ordenadores a la vez, el trabajo de algún alumno puede verse frenado. Por eso algunos alumnos han comentado la conveniencia de que hubiese varios profesores en el aula. En algunas de las sesiones que hemos realizado con los alumnos, nos acompañaban los licenciados que están realizando con nosotros las prácticas del Curso de Aptitud Pedagógica del I.C.E., en esos casos se observó como la marcha era más fluida porque muchas dudas se podían resolver a la vez.
Hemos podido observar que alumnos que en la clase tradicional no hacen nada, delante del ordenador han intentado seguir (normalmente a un ritmo más lento dado sus carencias) las actividades propuestas. Por eso estamos convencidos que el ordenador es una poderosa herramienta de motivación siempre y cuando que no se abuse de él.
Los conocimientos adquiridos por los alumnos es más profundo y sólido al ser ellos la parte fundamental y activa del proceso de aprendizaje.
Un aspecto fundamental es que el alumno avanza al ritmo impuesto por sus capacidades e intereses, algo que es prioritario en la atención a la diversidad. En una clase normal el alumno disruptivo impide muchas veces la marcha normal de la asignatura, mientras que con este método su influencia se diluye. Incluso se pueden nivelar la dificultad de las actividades según la base de conocimientos que tengan los alumnos.
Respecto a la forma de organizar la clase nos parece oportuno reseñar lo siguiente:
Antes de comenzar con la experiencia es muy útil mostrar a los alumnos como se manejan las escenas, como se utilizan los botones y como se navega por las unidades Descartes. Si es posible lo ideal es proyectárselo mediante un cañón conectado a un ordenador.
Los alumnos deben trabajar por parejas o individualmente si hay suficientes ordenadores. Nunca más de dos personas por ordenador. Los alumnos deben intercambiarse regularmente los papeles, para que no sea siempre la misma persona quien acapara el teclado o el ratón.
La estructura del aula debería de ser en forma de U para que el profesor, en todo momento, vea qué es lo que están haciendo los alumnos.
Nos parece oportuno alternar sesiones con el ordenador y sesiones en el aula normal, que pueden servir principalmente para comprobar el grado de asimilación de las actividades que han realizado los alumnos.
Creemos que hay que mostrar especial interés en que los alumnos utilicen, completen y trabajen el cuaderno de apuntes para sacar provecho a las actividades que realizan con el ordenador.
La experiencia nos ha mostrado que la utilización del ordenador, en concreto con la herramienta Descartes, es muy positiva para la enseñanza de las matemáticas. Pero si somos de la opinión que debe ser sólo un recurso más de los que se utilicen en el aula. Igual que cualquier otro recurso (vídeos, materiales manipulativos, juegos, puzzles, medios de comunicación, etc.) no puede abusarse de él pues terminan perdiendo su originalidad y capacidad de motivación.
El grado de satisfacción de los alumnos al utilizar la herramienta Descartes ha aumentado bastante con respecto a la marcha normal de la asignatura, han trabajado más y han asimilado mejor los conceptos, ello ha influido para que el grado de satisfacción del profesorado también haya aumentado. Creemos que uno de los comentarios recogidos en la valoración final refleja fiélmente cuál debe ser el espíritu de estas actividades. Como decía una de las encuestas: “He aprendido casi sin darme cuenta”.