La lucha por la justicia debe contar con un bienestar general.
Para el Estado del bienestar las personas ocupan el segundo lugar.
El orden económico debe buscar el bienestar para asegurar la justicia.
La justicia social estriba en tratar a cada uno como persona.
El bien común no es el bien de la mayoría sino que todos los miembros de la sociedad, sin excepción, sean tratados como personas.