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Música y educación

La relevancia de la instrucción musical como parte inequívoca de una auténtica educación global que forme al alumno ha sido justificada y puesta de manifiesto con continuidad a lo largo de la historia del pensamiento.

La capacidad para 'mover el ánimo', para educar en valores y configurar actitudes más allá del puro aprendizaje técnico, es una de las potencialidades más interesantes del fenómeno musical como vehículo pedagógico. De ahí la importancia de su presencia en los actuales planes de estudio de la Enseñanza Secundaria Obligatoria y el Bachillerato, bien como materia obligatoria, optativa u optativa de modalidad según el caso.

El siguiente inventario de textos no pretende sino ofrecer algunas muestras de ese pensamiento que, a lo largo de la Historia, ha confiado a la Música la virtud de ser un excelente e insustituible elemento didáctico.

autor	referencia	descripcion
G.Mahler	Carta a M. Marschalk	Mahler, carta a M. Marschalk, 26 de marzo de 1896 Considero como una simpleza componer música a partir de un programa ya dado. De la misma manera, pretender acoplar un programa a un fragmento musical me parece poco satisfactorio, además de estéril. Un cuadro musical proviene primeramente de una experiencia vivida por el autor y, por lo tanto, de una realidad lo suficientemente concreta para que pueda vestirse con palabras… Será, pues, inútil, que al comenzar –es decir, cuando mi arte es aún extraño- el auditor pueda disponer de algunos límites o señales indicadoras.
Mozart	Carta a su padre	La poesía debe ser hija obediente de la música. Tanto más debe gustar una ópera cuanto más bien elaborado esté el plan de trabajo, con la letra escrita sólo para la música, y no para ésta o aquélla miserable rima… El ideal sería que un buen compositor, entendido en teatro y en condiciones de exponer su propio parecer, diera con el mirlo blanco que es un verdadero poeta… Los poetas me dan la impresión de los tocadores de trompa, con sus estúpidos exhibicionismos. Si nosotros, los compositores, quisiéramos obstinarnos en seguir estas reglas…, convertiríamos la música en algo tan malo como sus libretos.
B. Bartok	Carta de B. Bartok a Mme. Müller	… mi situación personal en este momento es bastante desesperante, pues no sólo mi editorial se ha convertido en una empresa nazi –al propietario y a los directores sencillamente les señalaron la puerta- sino que también la A.K.M., que es una sociedad vienesa, acaba de ser nazificada. Precisamente acabo de recibir un cuestionario escandaloso sobre quiénes eran mis abuelos y otras cosas; en una palabra: “¿Es usted de raza germánica, de raza similar, o no ario?”. Naturalmente, ni Kodaly ni yo lo hemos rellenado…
Mozart	Carta de W.A.Mozart a su padre	…las pasiones, violentas o no, jamás deben expresarse tan vigorosamente que repelan, y la música, aun en las situaciones más tremendas, nunca debe ofender al oído sino seguir dando placer, manteniéndose siempre musical.
Beethoven	Cartas	Puedo decirte que me siento mejor y más fuerte, aunque mis oídos siguen zumbando y mugiendo día y noche. Debo confesarte que llevo una vida miserable. Hace caso dos años que evito tratar a la gente, porque me resulta imposible decirles: estoy sordo. Si tuviera otra profesión podría hacer frente a este achaque… Para darte una idea de esta extraña sordera te diré que, en el teatro, tengo que ponerme muy cerca de la orquesta para entender lo que dicen los actores; si me pongo lejos, no puedo oír las notas agudas de los instrumentos y de las voces… Si todo es posible desafiaré a mi destino, quien presiento que a lo largo de mi vida seré la más desdichada criatura de Dios… Resignación. ¿Qué espantoso recurso! Sin embargo, es lo único que me queda.

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