Pasatiempos musicales

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Pasatiempos musicales

Tipo	Tema	Descripción
Anécdota	Ritmo	En 1.966, Leonard Bernstein, después de dirigir espectacularmente La Consagración..., se acercó apresuradamente a Stravinsky y se arrodilló ante él, a modo de dramático homenaje. El maestro reaccionó diciendo bruscamente: Lenny, todos tus tiempos estuvieron mal."
Anécdota	Textura	Un día de 1933 se procedía en Jaén al estreno de un pasodoble de Emilio Cebrián Ruiz titulado "Rafaelita González". Asistía al evento el maestro D. Ricardo Villa, fundador y director de la Banda Municipal de Madrid, el cual aconsejó a Emilio Cebrián que cambiara el nombre de la obra, que no hiciera "cosas" dedicadas a personas. Ni corto ni perezoso, lo tomó al pie de la letra y "Rafaelita Gonzalez" se convirtió por medio de una simple combinación en "RAGON FALEZ".
Anécdota	Melodía	AÑO 2000 En una noche oscura como corresponde a diciembre, en un pueblo leonés llamado Villafañe con las calles levantadas y barro hasta las orejas, un día de ventarrón que levantaba las piedras llega el Orfeón con gran ilusión a cantar los villancicos que a este tiempo corresponde y que hacen feliz a los chicos. Pero gran desilusión, no hay luz en el pueblo y llevan horas intentado solución al apagón. Esta el pueblo entristecido pues el Orfeón a ido a cantar por Navidad a la puerta de la iglesia estaba la vecindad y la luz que no venía. -¿Velones si que habrá de los de Semana Santa?. - Claro, y velas pequeñas. Mientras el coro se viste para la actuación chicos y grandes colocan y encienden las velas alrededor del altar y a lo largo del pasillo de la iglesia. Fue algo grande muy bonito cantar villancicos a la tenue luz de la velas y sentir el calor de la gente de Villafañe con la actuación del Orfeón Leonés en una fría noche de invierno. Como dato curioso nada más terminar la actuación vino la luz y tuvimos la oportunidad de tomar unos pinchos que nos tenían preparados con la gente del pueblo.
Anécdota	Melodía	Enrico Caruso desde su infancia tuvo una gran pasión por el canto y especialmente por el teatro, pero nunca tuvo medios para poderse dedicar a estos estudios. Unas pocas lecciones le dio gratis la hermana del médico de su madre, pero a poco se interrumpieron porque a ella no le gustaba la exagerada mímica y el acento napolitano del muchacho; más tarde el maestro Vergine le dio algunas lecciones pero sin mucho entusiasmo por que Caruso tenía voz muy débil, tanto que cuando fue Caruso llamado al servicio militar sus compañeros lo llamaban "el viento que pasa por las rendijas de las ventanas" (Vento di fessura).
Anécdota	Melodía	Cuando Debussy estrenó su triptico sinfónico "El Mar", el público estaba dividido; unos amigos aplaudían estruendosamente, mientras que otros silbaban con no menos entusiasmo. En un instante de calma, una voz desde la galería, exclamó: "J'ai le mal de mer" (tengo el mal del mar, o sea: estoy mareado), que provocó un huracán de carcajadas. Eric Satie, siempre burlón, comentaba: La obra no es fastidiosa, y sobre todo, en el primer movimiento: "De la aurora al mediodía sobre el mar", me ha gustado cierto rinconcito deslumbrador situado entre las diez y las diez y cuarto".

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